Si la pega de esta ciudad suele ser la cantidad de turistas que hay, en pleno carnaval, os podéis imaginar el bullicio y agetreo que se vive en sus estrechas calles, es desproporcionado. En ocasiones la marea humana se quedaba literalmente estancada sin poder ir hacia detrás o adelante, formandose grandes colas tan solo para ir de un lado a otro de la ciudad.
Pero si Venecia es de por si una ciudad preciosa, visitarla durante su principal festividad con sus calles decoradas y la gente vestida de época, es una experiencia inigualable y desde luego valió la pena a pesar de las multitudes.
El carnaval veneciano poco tiene que ver con las fiestas de otros paises, donde carrozas llenas de gente disfrazada se pasean al ritmo de la musica, en venecia el carnaval es elegante, silencioso y mucho más refinado. Fue una experiencia muy bonita, y los disfraces y máscaras eran precios, la única pega fue la gran cantidad de gente con cámaras de fotos que no sabe comportarse y van empujandose unos a otros para hacer fotos sin ton ni son.
El carnaval veneciano poco tiene que ver con las fiestas de otros paises, donde carrozas llenas de gente disfrazada se pasean al ritmo de la musica, en venecia el carnaval es elegante, silencioso y mucho más refinado. Fue una experiencia muy bonita, y los disfraces y máscaras eran precios, la única pega fue la gran cantidad de gente con cámaras de fotos que no sabe comportarse y van empujandose unos a otros para hacer fotos sin ton ni son.
Pero en cuanto acabó el carnaval las calles se vaciaron y volvió la calma a la ciudad. Es cierto que seguían habiendo muchísimos turistas, a decir verdad la ciudad vive principalmente del turismo, pero lo bueno de Venecia es que al ser una especie de laberinto, por mucha gente que haya siempre puedes meterte por un callejón y de repente encontrarte que estas completamente solo y disfrutar de la paz de los canales.
Sin duda una de las ciudades más bellas del mundo, una ciudad única, en la que hay muchísimo que ver y que sigue cautivando a todo el que la visita. Nosotros ya estamos deseando volver.
Volveria de nuevo. Un vez alli todo parece mas pequeñit y la unica pega es el olor terrible por el agua estancada.
ResponderEliminarUn besito de UNA CENICIENTA MODERNA