12.05.2009

Rumbo a Laos

*Este post debería haberse publicado el 2 de diciembre.

Mekong River

Tras abandonar Chiang Mai empezó nuestro lento viaje rumbo a Laos. Primero fuimos a Chiang Rai, después a Chiang Khong desde donde cruzamos la frontera hacía en Huay Xai y desde allí cogimos un barco para descender el Mekong. Fueron en total 3 días enteros de viaje, 1 de autobús y 2 de barco, hasta llegar a nuestro destino.

Mi cumpleaños (Kenneth) cayó exactamente en el segundo día de viaje que pasamos por entero en el barco para hacer noche en Pakbeng, una pequeña aldea a orillas del Mekong que vive solo de los turistas que pasan noche en ella para seguir rumbo a Luang Prabang. A las 9 de la noche se cortaba la electricidad del pueblo, así que no había muchas posibilidades de celebración, además no había cobertura en el móvil y menos aún internet, por lo que sin felicitaciones, regalos, ni la familia cerca, decidí aplazarlo hasta el año que viene :D A decir verdad, ya sabíamos que caería estando de viaje, pero una vez estuvimos en Chiang Mai, no sabíamos muy bien por donde seguir la ruta, tampoco queríamos quedarnos aún más días en la ciudad y al final el viaje por el río fue la opción que más sentido tenía sin gastarnos una fortuna.

Solo quiero daros las gracias a todos los que os acordasteis de mi y de un modo u otro me felicitasteis, aunque me llegara unos días después!

Mekong River

Mekong River

Mekong River

En cuento a la travesía por el río, fue bastante agotadora porque era un barco pequeño, con bancos de madera alineados como en un autobús y repleto de gente hasta los topes. No había mucho que hacer más allá de leer los libros que habíamos traído y disfrutar del paisaje, que aunque bastante monótono, tuvo sus momentos, como ver los poblados de cabañas alzándose entre la selva, los niños jugando y bañándose en la orilla o el atardecer en el Mekong.

Mekong River

De todas formas si tuviéramos que elegir un momento nos quedaríamos con el desembarco en Pakbeng, a plena noche, sin ni una luz aparte de un par de linternas que agitaban los tripulantes del barco y una pasarela de madera de un palmo de ancho y unos 3 metros de largo para bajar al embarcadero, era difícil saber desde que altura sería la caída pero en algún punto se encontraban las oscuras aguas del río. Con la mochila a cuestas, con la gente empujando a nuestra espalda y a ciegas, conseguimos llegar al otro lado donde docenas de personas nos esperaban agitando carteles de hostales y restaurantes y gritando Hostel, Hostel! Fue toda una experiencia, aún no puedo creer que Marta consiguiera cruzar!

Mekong River

Mekong River

2 comentarios:

  1. Madre mía!!!! Hubiera pagado por ver a mi hermana atravesando la pasarela!!!!!!!! Pero después de todo esto que estais pasando, no va a haber quién le tosa... jajajaja!!!!! Besitos.

    ResponderEliminar
  2. Si la verdad es que se esta curtiendo poco a poco jaja pero bueno aun le queda :P el tema de los mosquitos no lo lleva muy bien!

    Muchos besos de parte de los dos.

    ResponderEliminar