Rodeada por el gran desierto de Dasht-e Kavir, Kashan es una pequeña ciudad situada en la ruta entre Teherán y Esfahan. Floreción como uno de los núcleos comerciales durante la época Qajan en el siglo XVIII y XIX y su principal atracción son las lujosas residencias de los mercaderes de aquella época, hoy convertidas en hoteles y museos.
Kashan al igual que otras ciudades del centro de Irán destaca por sus rudimentarios edificios de adobe y ladrillo que junto con el paisaje desértico crean una atmósfera muy árida donde apenas se ve más color que el tono natural de la tierra.
Es una sensación extraña, toda la ciudad es muy uniforme, de colores marrones y ocres, además con la lluvia tuve la impresión de llegar a un lugar muy gris y triste, pero esa imagen se disipó nada más salir a pasear cuando unos niños me saludaros desde el otro lado de la calle, después un coche tocó la bocina saludandome, un grupo de niñas empezaron a gritar "hello, hello!" y en definitiva cada vez que me cruzaba con alguien me respondía con una sonrisa. Como os dije en Teherán no tuve ninguna mala experiencia y pronto se disipó cualquier temor a viajar por el país pero fue en Kashan donde tuve mi primer contacto con el Irán más real, el de la gente humilde, el de la gente que en vez de recibirte con desconfianza o recelo se alegran y te ayudan en todo lo que puedan sin importar quien seas o de donde vengas.
Las casas históricas son una maravilla, son auténticos palacios de varias plantas, con jardines, estanques y torres. Los mercaderes más ricos daban rienda suelta a la imaginación de los arquitectos en su competición por construir la casa más bonita y lujosa de la ciudad y sin duda crearon verdaderas joyas. La más famosa es la de Khan-e Boroujerdi con su singular cúpula y sus delirantes bóvedas que habrían hecho las delicias del mismísimo Gaudí.
Kashan es un lugar que puede pasarse por alto fácilmente, pero me pareció una parada agradable y con un ambiente muy distendido. La mayoría de alojamientos son antiguas casas reconvertidas en bonitos hoteles boutique, el antiguo bazar es enorme y se puede comprar casi cualquier cosa, eso sí en Kashan también descubrí que entre la 1:30 y las 3:30 está todo cerrado a cal y canto! también hay algunas mezquitas interesantes, sobretodo la Masjed-e Agha Borzog que de noche con su colorida iluminación es bastante impresionante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario