紫禁城 Zǐjìn Chéng o "La ciudad prohibida" es un extenso complejo palaciego construido a principios del siglo XV para servir de residencia al emperador chino durante las dinastías Ming y Qin. Actualmente forma parte del Patrimonio Mundial de la Unesco y es sin duda una de las principales atracciones turísticas de Pekín.
Si hay algo que decir de la ciudad prohibida es que es ENORME, para que os hagáis una idea, la zona amurallada cubre unas 72 Ha, contiene actualmente 980 edificios y unas 9000 habitaciones. Nosotros le dedicamos un día entero y podríamos haberle dedicado tres tranquilamente, la verdad es que lo mejor de la ciudad prohibida, más allá de las gigantescas plazas con sus puentes de mármol, son sus callejuelas, porque realmente es una pequeña ciudad en si misma y es por eso que lo adecuado sería vagar tranquilamente por sus calles para poder disfrutar y descubrir todos esos pequeños rincones escondidos a las masas de turistas que suelen infestar cada palmo de este lugar. La verdad es que en cuanto te apartas un poco de los edificios centrales puedes apreciar ese aire decadencia y majestuosidad que la hacen tan interesante, con sus paredes rojas, sus grandes tejados vidriados de amarillo, sus esculturas corroídas y sus suelos de piedra erosionados por el caminar. En cierto modo recuerda un poco a Roma o a los barrios medievales de Europa, en definitiva todos aquellos lugares que vivieron días de esplendor pero que con el paso del tiempo no hacen sino ganar en encanto.
Una visita obligada para todo aquel que vaya a China y que desde aquí os recomendamos a que hagáis algún día, eso sí traeros un bocata y unas buenas bambas!
Encontrareis una pequeña selección de fotos de la ciudad prohibida en el Flickr al que podéis acceder clickando en el lateral o en la foto de cabecera de esta entrada, esperamos que os gusten!
10.16.2009
Paseando por las calles de la Ciudad Prohibida
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